
Una noche, antes de ir a ver un espectáculo en Broadway, Steve y yo pasamos por See No Evil, una pizzería diminuta escondida bajo el nivel de la calle, dentro de la estación de Subway de la 50th Street. Hay un cartel junto a las escaleras, pero si no sabes que está ahí, lo más probable es que pases de largo sin darte cuenta. Tiene un aire de speakeasy, de esos bares secretos—solo que en lugar de cócteles, aquí sirven pizzas buenísimas y arancini.
El local es pequeño, con techos bajos, y acogedor en ese estilo caótico y ruidoso tan típico de Nueva York. Las mesas están muy juntas, y desde cualquier sitio puedes ver directamente la cocina abierta. Siempre me tranquiliza ver que la comida se prepara desde cero—y el olor ahí dentro era espectacular.
Estoy casi segura de que pedimos arancini para empezar, aunque no encuentro ninguna foto en mi móvil, así que puede que me lo haya imaginado. Lo que sí sé es que pedimos dos pizzas:
FUNGHI – champiñones, panna, ajo asado, parmigiano, fontina, rúcula, limón
HELL PIE – salsa, soppressata picante, pepperoni, mozzarella ahumada, pecorino, chile calabrés
Las pizzas estaban realmente buenas. Llenas de sabor y claramente hechas con ingredientes de calidad. Mi favorita fue la Hell Pie. El personal nos avisó de que era picante, pero para mí tenía el punto justo. Steve prefirió la Funghi, más suave, aunque si me preguntas, llevaba demasiada rúcula por encima.
En cuanto al tamaño, las pizzas eran más bien pequeñas, y los dos coincidimos en que la proporción entre masa y relleno tiraba un poco demasiado hacia la masa. Sobre todo la Funghi, con la que Steve terminó haciendo una pequeña montaña de bordes de pizza al lado de su plato (él no se come los bordes).
Entonces, ¿vale la pena See No Evil? El sitio tiene su encanto, y el hecho de que esté en una estación de Subway le da ese toque secreto. Los precios son algo elevados (nuestras pizzas costaron 27 y 29 dólares), pero bueno, estamos en Midtown Manhattan. No diría que es un lugar imprescindible, pero si ya estás por la zona y te apetece probar un pedazo de cultura pizzera underground—literalmente—vale la pena pasarse.
Después me enteré de que tienen un postre de soft-serve con aceite de oliva y sal que al parecer es todo un clásico—me habría encantado probarlo. Así que sí, supongo que habrá una próxima vez.
See No Evil, 210 W 50th St Concourse #1, New York, NY 10019, United States




